Los lubricantes de cera para la cadena de bicicleta son una opción cada vez más popular entre los ciclistas. Estos lubricantes ofrecen una serie de ventajas sobre los lubricantes tradicionales a base de aceite, como una mayor duración de los componentes, una menor acumulación de suciedad y un funcionamiento más silencioso.

Ventajas de la cera:

• Menor acumulación de suciedad: Al quedarse sólida, la cera no permite que se adhiera la suciedad tan fácilmente como en el aceite. Esto significa que la cadena se mantendrá más limpia y funcionará con mayor eficacia.
• Funcionamiento más silencioso: La cera reduce la fricción entre los eslabones de la cadena, lo que hace que la bicicleta funcione más silenciosamente.
• Mayor duración de los componentes: al no pegarse la arenilla y el polvo abrasivo a la cadena, se reduce la agresividad del raspado a los dientes del plato, roldanas y del cassette, permitiendo que duren muchos más kilómetros.
• No te manchas: No te mancharás la ropa ni tus manos de grasa. Esto es especialmente importante para la gente que usa su bici en ciudad para ir a trabajar.
• Mayor ligereza: aunque parezca una tontería, la suciedad que acumula el aceite en todos los platos, los 12 piñones y las 2 roldanas, al final son gramos inútiles que tenemos que llevar, y lo que es peor, los tenemos que rotar con el gasto de vatios que eso supone. La cera al mantener limpia toda la transmisión nos ahorra ese peso y esos vatios.

Desventajas de la cera:

• Menor duración de la lubricación: El principal inconveniente de los lubricantes de cera es que duran menos kilómetros que los lubricantes a base de aceite. Esto se debe a que la cera al quedarse solida es aplastada por las pletinas de la cadena y va siendo expulsada hacia afuera. Para hacerla más duradera se suelen añadir ciertos aditivos como el Teflon, partículas cerámicas, el MoS2, el grafito o el grafeno que se quedan pegados a las superficies metálicas y que reducen la fricción incluso aunque ya no quede cera. Una cera básica te puede permitir rutas entorno a los 50-60km, mientras que si lleva aditivos puede durar más de 100km.
• Precio: Los lubricantes de cera suelen ser más caros que los lubricantes a base de aceite.
• Dificultad de aplicación: Los lubricantes de cera pueden ser más difíciles de aplicar que los lubricantes a base de aceite. Esto se debe a que, principalmente en climas muy fríos, la cera es más espesa y se seca más rápidamente, impidiendo que se filtre en profundidad en la cadena.
• Mayor corrosión de la cadena: si la cadena es de gama baja y no tiene tratamiento anticorrosión, la cadena se oxidará mucho antes acelerando su desgaste. El aceite en cambio, por su propia naturaleza, protege bastante de la oxidación y corrosión de los metales. Las ceras más caras suelen llevar aditivos anticorrosión para minimizar esta desventaja.
• Menor duración bajo condiciones extremas: en condiciones de lluvia y barro la cera dura mucho menos de lo habitual. Para evitar este efecto es importante que incluya aditivos que queden pegados al metal como el MoS2, el teflón, etc.

Consejos para usar lubricantes de cera:

• La primera vez que lo apliques a una cadena limpia la cadena a fondo con un desengrasante antes de aplicar la cera. Esto ayudará a eliminar la suciedad y el aceite antiguos, pues si no los quitamos la cadena seguiría manchandose con facilidad debido al aceite anulando una de las ventajas de la cera.
• Aplica el lubricante en una capa fina y uniforme. Si aplicas demasiado lubricante, puede acumularse suciedad y reducir la eficacia del lubricante.
• Deja que el lubricante se seque completamente antes de usar la bicicleta. Normalmente lo mejor es hacerlo el día antes de montar. Esto ayudará a que el lubricante se adhiera a la cadena y dure más tiempo.

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